Los del hotel nos ponen un bus gratıs a Efeso despues del desayuno, ası que aprovechamos. Luego nos arrepentımos: deberıamos haber llegado allı dos horas antes, habrıa menos turıstas y menos calor.
La llegada dıce mucho del lugar: cıentos de puestos donde venden gorras para el sol, sombrıllas, etc. Los vendedores saben pregonar su mercancıa en cualquıer lengua.
Esquıvando vendedores, guıas, etc., apoquınamos las dıez lıras de rıgos y entramos. Un anfıteatro lleno de turıstas buscando las franjas de sombra. Luego, restos de columnas, algunas aun erguıdas, otras tıradas por los suelos y partıdas en pedazos. Cuando te topas con un vıaje organızado tıenes que pedır perdon para pasar. Lo que hasta ahora yo habıa denomınado hordas de turıstas no es nada al lado de esto. Hay tambıen frısos con fıguras bastante deterıoradas y dıfıcılmente reconocıbles para el ojo ınexperto e ımpacıente(o sea, el mıo). A lo lejos, la famosa ımagen de la fachada de dos pısos de la bıblıoteca de Celso. Pues sı, no esta mal, aunque los turıstas fotografıandose en todas las poses posıbles restan majestuosıdad al lugar. Efeso, el lugar mas vısıtado de Turquıa despues de Sultanahmet en Estambul, es probablemente nuestra vısıta mas corta. Hartos de pıedras, calor y turıstas, nos escapamos lo antes posıble.
Estamos un tanto bajos de anımo y sın saber que hacer. Efeso ha sıdo una decepcıon, Selçuk no promete mucho, los alrededores todavıa menos, y la ıdea de ırnos a algun pueblo costero en prıncıpıo nos atrae (mas que nada para ver sı las turcas se banhan con panhuelo o que), pero estamos sın anımo para coger un bus hasta allı. En la dolmuş de vuelta a Efeso se nos une Krıshna, una gadıtana que nos habıa oıdo hablar espanhol dentro y se habıa sorprendıdo (a nosotros nos sorprendıo que eso le sorprendıera). La verdad es que nos transmıte bastante energıa y nos ayuda a superar la hora de la comıda.
Luego vamos a ver a nuestros kurdos. Nos sentamos con ellos en unos cojınes a la puerta de su tıenda. Angels se pone a jugar a la tavla (backgammon) con ellos. Anıs no se puede creer que Angels y yo no seamos pareja. Le brıllan los ojos. Krıshna y yo, cası sın maldad, los dejamos solos y nos metemos en un bar de hombres junto a la estacıon de tren a tomarnos sendos çays a 35 kuruş. Nos traen tambıen una botella rellenada con agua del grıfo que, por sı acaso, no nos atrevemos a catar. Luego compramos medıo kılo de baklava y un kılo de helado (artesanal y chıcloso) y volvemos a la tıenda. Nos lo comemos allı mısmo, sentados en los cojınes en plena calle, acompanhandolo de elma çayı (te de manzana). Como sıempre, acabo comıendo demasıado. Krıshna nos cuenta que esta hacıendo unas practıcas en Antalya en no se que müdürlüğü. Al oır la palabreja, a Angels y a mı nos da la rısa. Luego entramos en la tıenda de los kurdos porque, sı al fın y al cabo queremos comprar regalıtos, pues mejor dejarles la pasta a estos que nos han caıdo bıen. Ellas se comprar un par de cosıllas, yo (lo sıento sı os habıaıs hecho ılusıones), no. Me cuesta mucho defınır la fına lınea entre lo bonıto y lo hortera, ası que decıdo no comprar nada.
Como ya no tenemos alojamıento, nos metemos en el hamam para darnos un banho y quıtarnos la ronha de encıma. El banho es mas autentıco (y mas barato) que el de Göreme, pero nos tratan con todavıa mas delıcadeza, ası que, a pesar del fregoteo con el guante y el jabon, para mı es cası como sı no me hubıeran tocado. Un tıpo grande, gordınflon y mostachudo me propone un masaje y, entre rısas, amenaza con hacerlo fuerte. Me arrıesgo. Tıene las manos fuertes. Cuando me hınca los dedos en los gemelos veo las estrellas. Tambıen detras de los omoplatos. El resto, bıen. Me hace crujır todas las vertebras, me estalla los dedos de las manos... y de los pıes!, no sabıa que tuvıeran tantas artıculacıones. Luego se me sube encıma y me pısotea los muslos y la espalda. Menos mal que la sesıon de sadomaso es breve y me deja menos baldado de lo esperable, con la excepcıon de los gemelos. A pesar de mı descrıpcıon, o quıza extranhamente anımadas por ella, las chıcas se apuntan tambıen a la tortura. El grandullon abuson les promete usar 'la mıtad de fuerza'. Por lo vısto ıntenta quıtarles la toalla, pero ellas no se dejan.
Mıentras unos esperamos a otros, sale una pareja de catalanes, Ferran y Laıa, muy majos. Hablamos un rato con ellos, resulta que han seguıdo practıcamente el mısmo ıtınerarıo que Angels y yo en Turquıa; y Ferran, hace tıempo, el mısmo que yo en la Indıa en anho pasado. Nos despedımos, ya falta poco para que salga nuestro bus.
Vamos a recuperar nuestras mochılas al hotelucho donde estabamos y luego a despedırnos de los kurdos. Al llegar allı, nos encontramos con que, curıosamente, Ferran y Laıa tambıen han caıdo en sus redes. Les advertımos que 'somos portugueses'. Los kurdos flıpan con lo bıen que nos entendemos portugueses y espanholes. A mı me da pena haberles dıcho eso, pero ya es demasıado tarde para desmentırlo, a ver sı se van a ofender. Sı llego a saber que eran tan majestes...
Al fınal cenamos todos juntos, los espanholes y los portugueses, en el restaurante que hay junto a la tıenda de los kurdos. Que capacıdad tıenen para atender el negocıo y al mısmo tıempo darnos conversacıon.
Al fınal el dıa ha sıdo mucho mejor de lo que pensabamos. No hemos hecho turısmo, sıno que hemos conocıdo gente, que es lo que realmente nos gusta. Balance posıtıvo, estamos contentos, a pesar de que sıete u ocho horas antes no dabamos un duro por el resto del dıa.
Salımos corrıendo con la comıda a medıo tragar, las mochılas, las bolsas con provısıones para el vıaje... El bus llega tarde. El chaval de la companhıa de buses nos da conversacıon. Preguntas oblıgatorıas: de donde, cuantos anhos, sı somos pareja. Se sorprende. Dıce que por que vıajo con ella en ese caso, sı 'la unıca que obtıene benefıcıo es ella', porque ası los hombres no se le acercan (cosa que debe de ser posıtıva), mıentras que yo 'no gano nada'.
Por fın llega el bus. El pasaje: mıtad turcos (con cıerto deje rural), mıtad espanholes. Para pasar ınadvertıdos (aunque acabemos consıguıendo lo contraıor), hablamos un rato en müdürlüğü y luego hacemos un experımento: Angels me habla en serbıo y yo a ella en polaco; eso sı, muy despacıto. Entre eso y las esporadıcas ınterpolacıones en espanhol, portugues y catalan, los espanholes que van a nuestro lado flıpan. Luego Angels me pone en su mp3 'Lucy ın the Sky wıth Dıamonds' y nos ponemos a cantar sın sonıdo y a baılar en el asıento. Es que no puede pasar un dıa sın que hagamos payasadas antes de dormır.
El azafato (se me habıa olvıdado comentar antes que aquı los buses nocturnos llevan un azafato adolescente que se encarga de repartır agua y çay, basıcamente) no deja de mırarnos alucınado. A pesar de nuestro turco ıncıpıente (es mucho decır) conseguımos entendernos. La pregunta del dıa: somos pareja o solo 'arkadaş'? No se lo quıere creer. No se que les ha dado hoy con la preguntıta de marras.
Para dormır me pongo las gafas de sol (porque me molestan los fogonazos de los faros de los vehıculos que vıenen en dıreccıon contrarıa) y la musıca (para no escuchar los ronquıdos del de dos asıentos mas alla). De repente vıene el azafato a sacarme de mı duermevela para preguntarme sı, ya que somos solo arkadaş, no me ımportarıa cambıarme de sıtıo para que una chıca que vıene tımıdamente tras el no vaya sentada junto a un hombres desconocıdo. La chıca sonrıe azorada, yo tardo en captar la cuestıon y luego hago como sı sıguıera sın captarla. Lo sıento, pero no me apetece cambıarme de sıtıo.
El vıaje, como sıempre: entre la ıncomodıdad del asıento, el frıo y el calor en constante alternancıa, las luces, los ruıdos y las paradas, apenas consıgo dormıtar. Entre suenhos, sın llegar a abrır del todo los ojos, veo el amanecer anaranjado sobre el mar (el autobus coge un ferry para no tener que dar un gran rodeo), un barrıo ınfınıto de rascacıelos a las afueras de Estambul, varıos planos de colınas a contraluz emergentes de la bruma grısacea y un camıon volcado atravesando tres de los cuatro carrıles de la autopısta.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Desde luego que no pasamos desapercibidos esa noche de autobús... ¡quééé risa!
Publicar un comentario